lunes, 17 de diciembre de 2012

Fantasías


¿Cuánto tiempo ha pasado ya desde la última vez que soñaste?

De niños vivimos de la fantasía. Cualquier objeto cotidiano se puede convertir en una espada, una pistola de repeticiones, un veloz automóvil o una nave espacial. Nuestra imaginación da y da sin reparar. ¿Cuándo cambiamos? ¿Por qué? Se me hace una verdadera pena el hecho de que día a día y a cada minuto, como una flama que se apaga en la oscuridad una inocente mente llena de fantasías se pierda.

Vivimos en una sociedad en la que a los sueños se les da un segundo lugar ante cosas realmente banales. ¿Por qué no nos damos cuenta de que los grandes pasos en la humanidad han sido dados por gente con sueños? Y es que es así, muy poca gente se aventura a perseguir sus sueños sacrificando lo demás, pero las personas que lo hacen y, las personas que los alcanzan viven una vida plena, una vida sin arrepentimiento.

En lo personal, a mí me gusta mucho ir al cine cuando exhiben cintas de aventuras épicas. Los paisajes, la música, el chocar de los metales durante las peleas. Cuando alguien ganaba una lucha por su habilidad y no por la cantidad de dinero que tenía o por el simple hecho de apretar un aburrido gatillo. Cada quien tiene su ideal de aventura perfecta y difiere mucho de mente a mente pero, ¿Por qué? o, más bien ¿Cuándo fue que tener aventuras quedó solo en las películas?
Si ir avanzando y evolucionando es encadenarse día a día a la rutina para conseguir algo de dinero y vivir quejándonos de que nunca es suficiente, entonces creo que en algún lado del camino nos equivocamos.

Soñar es gratis, relajante, divertido. En  definitiva el mundo sería un lugar mucho mejor si la gente en lugar de riqueza y estatus viviera de sueños. Si cada persona llevara a cabo, en mayor o menor escala su propia “aventura épica”. Seríamos tan ricos de alma. Y haríamos un mundo lleno de riquezas a la vez.



MIAM from AKAMA STUDIO on Vimeo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario